En
una recientísima investigación publicada en la revista Neurology se reporta la
correlación inversa encontrada entre la ingesta de omega 3 y la formación de
placas amiloides características de la Enfermedad de Alzheimer.
La
enfermedad de Alzheimer es una
enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta con deterioro cognitivo y
trastornos de la conducta. Típicamente se caracteriza por una pérdida
progresiva de la memoria y otras capacidades mentales, lo cual llega a
incapacitar totalmente a quien la padece. En mi opinión personal es una
enfermedad muy cruel, por la mala calidad de vida que ocasiona.
Hoy
en día no se sabe a ciencia cierta qué la produce. Una de las teorías más
ampliamente aceptadas, aunque con reservas por parte de algunos investigadores,
es la de la formación de placas amiloides u ovillos neurofibrilares. Estas
placas amiloides o placas seniles fueron descritas por Alois Alzheimer en 1906,
por lo cual la enfermedad lleva su nombre.
Pues
bien, de acuerdo a la investigación mencionada, mientras mayor fue la ingesta
de omega 3, menor la formación de placas amiloides. Es por ello recomendable, consumir
una cantidad adecuada de este aceite esencial para todo aquel que quiera
prevenir el desarrollo de esta enfermedad o a todo aquel que la padezca. .
Amiloide
significa que se parece al almidón, que reacciona como el almidón, el cual es
un carbohidrato. Y me llama mucho la atención que los depósitos de amiloides
cuando están ubicados en el páncreas (porque no son exclusivos del cerebro)
están relacionados con la diabetes tipo 2. Recordemos que las más recientes
investigaciones están vinculando la diabetes con la enfermedad de Alzheimer, a
la cual ya algunos denominan diabetes tipo 3. Es por ello que me parece recomendable
además, limitar la ingesta de todo tipo de azúcares y harinas refinadas, los
cuales no son necesarios para una alimentación sana. El consumo de azúcares y
harinas refinadas es un hábito cultural. Lo único que hacen es daño.
Por
otra parte, una de las funciones del amiloide en el cerebro es la protección
contra el estrés oxidativo. Podría ser que se acumule buscando proteger las
neuronas de los agentes que lo ocasionan. Entre los agentes que producen estrés
oxidativo se ha mencionado que algunos metales (como el aluminio y el mercurio)
podrían estar relacionados con la enfermedad de Alzheimer. ¿Suena lógico no?.
Por ello una recomendación adicional sería evitar la exposición a estos metales
tóxicos y una desintoxicación adecuada, guiada por algún profesional calificado
para hacerlo. No la hagan sin asesoría. Podrían hacer mas daño que bien.
Bendiciones Eugenia! Sobre el mercurio, debemos tomar en cuenta el incremento del mismo al cual estamos expuestos: contaminación, alimentos, amalgamas, etc. estas últimas hay una gran controversia, ya que muchos expertos dicen que se evapora y va al cerebro y otros órganos del cuerpo, de hecho en algunos paises del mundo ya han suspendido los tratamientos de dientes con amalgamas que contengan mercurio, luego tenemos tambien las vacunas. Esta enfermedad es tan antigua como la historia humana, hasta que le pusieron el nombre del cientifico, pero lo que llama poderosamente la atencion es el incremento tan desproporcionado que se ha desarrollado, incluyendo todas las plagas y enfermedades que nos estan acechando! Un Abrazo de Luz!..
ResponderEliminarMuchas gracias!
ResponderEliminaryo me quite las amalgamas por ese motivo. voy a chequearme la glucosa por que mama murio de alzheimer ella comia 3 kilos cambures diarios. yo cuide a mamita y sufrio mucho no poder caminar comer se le bajo mucho la autoestima por que queria ver a sus hijos varones que no la visitaban. yo sufri mucho al ver como mi mami se deterioraba y se le apagaban sus ojitos.
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