martes, 14 de julio de 2020

LA DIETA ALCALINIZANTE Y LA SALUD



 
El llamado pH es un indicador del grado de acidez o de alcalinidad de una sustancia. Se mide en una escala que va de 0 a 14. De cero a cerca de 7 para lo ácido (mientras más bajo más ácido) y por encima de 7 hasta 14 para lo alcalino (mientras más alto, más alcalino). El pH 7 es neutro (como el agua pura).

Ejemplo de líquido con pH muy ácido es el ácido de las baterías o ácido sulfúrico. En tanto que uno con pH muy alcalino es el hidróxido de sodio o destapador de cañerías (diablo rojo lo llamamos en Venezuela).
 
Diferentes partes del cuerpo tienen distintos grados de acidez o de alcalinidad. El pH normal de la saliva oscila entre 6,5 - 7,4 , el de la orina entre 5,5 – 6,5, el del ácido del estómago entre 1,5 - 4 y el de la sangre es ligeramente alcalino y tiene un margen muy estrecho (7,38 - 7,42). El pH de la sangre es tan importante que debajo de 7 o por encima de 7,8 sobreviene la muerte. Es pues, un parámetro fundamental en el monitoreo de la salud.
 
Algunas de las funciones del cuerpo solo ocurren en ciertos niveles de acidez o alcalinidad. Muchas enzimas y reacciones químicas del cuerpo funcionan mejor a un pH determinado. Un pequeño cambio en el pH de alguna zona del cuerpo puede tener un efecto profundo en el funcionamiento del organismo. 
 
 Por ejemplo, si el pH del terreno biológico  (es decir, los líquidos que se encuentran en el espacio intracelular, como la linfa) se torna ligeramente más ácido de lo normal, disminuye la capacidad de contracción de los músculos y aumenta la adrenalina.

           Los procesos naturales de desintoxicación que se desarrollan en el hígado, son una compleja red de reacciones. Su correcto funcionamiento depende en gran medida de un adecuado pH de los fluidos corporales.

Por ello, si el organismo está más acidificado de lo que conviene, estos procesos depurativos se dificultarán. Esto traerá consigo una mayor probabilidad de enfermarnos.
 
Algunas (no es una lista completa) de las enfermedades asociadas a una acidificación del terreno biológico de nuestro cuerpo   son: 
 
Cáncer
Artritis reumatoide
Artrosis
Osteoporosis
Lupus
Asma
Bronquitis
Sinusitis
Enfermedad de Crohn
Enfermedad Celíaca
Esquizofrenia
Esclerosis múltiple

 
Y ¿cuáles son los síntomas de una acidificación del cuerpo?
  
  • Debilidad ósea, Osteoporosis/osteopenia
  • Alergias, rinitis, erupciones cutáneas
  • Pérdida de masa muscular
  • Envejecimiento prematuro
  • Caries y problemas dentales como fragilidad y/o sensibilidad dental
  • Saliva ácida, encías inflamadas y sensibles, sabor metálico en la boca
  • Dolor de articulaciones, dolor muscular y gota
  • Falta de energía y fatiga crónica
  • Digestiones lentas y pesadas
  • Presencia recurrente de hongos, infecciones y virus
  • Tristeza, tendencia a la depresión, nerviosismo e irritabilidad
  • Insomnio, problemas para descansar satisfactoriamente
  • Aumento de peso, obesidad, y diabetes
 
Normalmente la variable que más influye en las variaciones de pH de los fluidos corporales es nuestra alimentación diaria, aunque no es el único factor. Existen otros como el estrés, la falta de descanso adecuado, la depresión, la contaminación, etc. Pero en este artículo nos limitaremos a la alimentación. 
 
Una dieta basada en alimentos acidificantes (que no es lo mismo que alimentos ácidos) baja el pH; mientras que una dieta basada en alimentos alcalinizantes, lo sube.
 
Los alimentos se clasifican en acidificantes (ojo, no en ácidos) y alcalinizantes (no en alcalinos), de acuerdo al efecto que tienen en el organismo después de la digestión. No de acuerdo al pH que tienen por sí mismos.

Por ello, su sabor NO es un indicador del pH que generarán en el organismo una vez consumidos.
 
¿Entonces qué comer?
 
Los alimentos acidificantes son en general,  las carnes (res, pollo, cordero, pavo, pescados, mariscos), los quesos, los huevos, las grasas (todas), el azúcar y todas las harinas (carbohidratos).
Los alimentos alcalinizantes son en general, todas las frutas (incluidas las cítricas) y los vegetales.
Un alimento con sabor ácido puede tener un efecto alcalino. Es lo que sucede con las frutas cítricas como el limón. Los minerales que contienen y que se mantienen luego de la digestión, como el potasio y el magnesio, ayudan a alcalinizar los fluidos corporales.

Para el mantenimiento de la salud, es recomendable ingerir una proporción de aproximadamente un 20-30 % de alimentos acidificantes y un 70-80 % de alimentos alcalinizantes.
 
       Queda ahora como tarea, que cada quién se cerciore de qué proporción de alimentos acidificantes/alcalinizantes consume cada día y sabremos hacia donde estamos llevando a nuestro cuerpo. 

      Busca asesoría para que aprendas cómo balancear tu plato para obtener todos los nutrientes que necesitas y en las cantidades adecuadas.
 
       Y recuerda: una dieta con una adecuada cantidad de frutas y vegetales es la mejor inversión que podemos hacer por el mantenimiento de nuestra salud.

          
       Si requieres orientación sobre programas de desintoxicación natural o si necesitas asesoría para tratamientos complementarios con métodos naturales envíame un email a ereboll@gmail.com para que nos pongamos de acuerdo para hablar por video llamada gratuita de 20 minutos de duración. Así veremos si podemos trabajar en conjunto para ayudarte a mejorar tu salud
 

       

No hay comentarios:

Publicar un comentario